Con la introducción de la computación en todas las tareas cotidianas, se abrió la posibilidad de la creación de programas que facilitaran las tareas a realizar, que automatizaran las actividades repetitivas, que requieren de un alto grado de precisión y que son propensas al error humano por lo monótonas o complicadas que puedan ser.

Desde ese momento, se comenzó a trabajar sobre lenguajes de programación que permitieran programar las acciones necesarias a través de un algoritmo. En un principio, estos lenguajes de programación estaban basados en texto, es decir, dependían de una sintaxis exacta para traducir las instrucciones que el programador quisiera realizar, a un lenguaje que pueda ser entendido por un computador. En este caso, tanto las instrucciones necesarias como el diseño de la interfaz gráfica deberían ser codificadas a razón de la sintaxis propia de cada lenguaje, lo que imponía un conocimiento profundo en el lenguaje mismo.

Con el paso del tiempo, estos lenguajes fueron evolucionando y dieron paso a una nueva generación que simplificó un poco esta tarea, añadiendo elementos visuales para el diseño de sus interfases de usuario, sin embargo, internamente seguían teniendo código de texto. Estos lenguajes “híbridos” comenzaron a tener un papel protagónico en la programación.

Finalmente, surge un nuevo paradigma de programación, la programación visual, en donde el protagonista deja de ser el texto y su sintaxis, y el uso de elementos visuales pasa a tener mayor importancia en el desarrollo, permitiendo la interconexión para realizar la automatización de tareas.

Bajo esta nueva forma de programación, Autodesk introdujo a Dynamo. La aplicación desarrollada para implementar este tipo de rutinas en aplicativos BIM, rompiendo las barreras de usuario, permitiendo a cualquier persona que no tenga conocimiento, automatizar sus tareas repetitivas a través de sus nodos (piezas de programación preconfigurados) y establecer el flujo de información por medio de sus conectores (líneas que direccionan las salidas y entradas) permitiendo obtener el resultado deseado.

Actualmente Dynamo está desarrollado para trabajar de forma aislada (Dynamo Sandbox o Dynamo Studio) o de forma integrada con algunas de las principales aplicaciones de Autodesk (Revit, Civil 3D, Formit, Advance Steel).

En resumen, Dynamo cambió el paradigma de la programación y abrió la posibilidad de resolver problemas, gracias a su facilidad de uso y la manera tan natural e intuitiva en la que se pueden crear algoritmos.